EL GÉNERO EN EL DEPORTE

En la mayoría de los deportes que conocemos, se presentan dos modalidades diferentes según tu género, y en este caso, el balonmano es uno de ellos. Pocos son los deportes que sean totalmente mixtos, y los que existen, lamentablemente no tienen la popularidad que merecen como son el Korfbal y el Kin-Ball, entre otros. Ambos juegos creados por profesores de Educación Física como tú y como yo, que pretendían justamente romper con la segregación por sexos en el deporte.

Kin-ball

Korfbal

¿Existen realmente diferencias en el deporte según el género que lo practique?

Lo primero que tenemos que hacer es diferenciar entre tu género y tu sexo, siendo éste último tu sexo biológico y el primero, cómo te identificas tú. En este caso hablaremos del sexo biológico.

Es innegable el hecho de que las diferencias sexuales existen y cada uno tiene sus características comunes. En el caso del hombre, tiene una mayor musculatura y facilidad de desarrollo de las mismas, por lo que suele tener más explosividad y fuerza. Por este motivo, en un estudio se demostró que la mujer presenta mejor resistencia muscular. 

Cabe resaltar que hay múltiples diferencias entre el sexo masculino y el femenino, pero éstas no son indicadores de superioridad o inferioridad. Cada uno dispone o no de una serie de características y capacidades básicas que pueden determinar el modo de juego en los diferentes deportes, pero éstas características no son unas inferiores a otras.

Lo que se está promoviendo es la existencia de la práctica igualitaria del deporte ya que se ha demostrado con la existencia de deportes como los antes mencionados, que podemos competir el ser humano junto, independientemente del sexo que seas.

La visión social del balonmano masculino y el balonmano femenino

Si comienzas a investigar un poco acerca del balonmano femenino, o incluso si empiezas a charlar con diferentes personas de tu círculo, no tardarás mucho en ver/oír la común frase: es que el "deporte que sea" femenino es peor/más aburrido que el normal. 

Sin razón alguna, el deporte femenino no es igual de aceptado, consumido ni practicado que el masculino. Analicemos la frase que he mencionado dos líneas más arriba:
"más aburrido que el normal". Efectivamente, porque lo que está normalizado es que el deporte haya sido un sector protagonizado por hombres y se considera que el deporte es masculino. Por eso todas las modalidades femeninas del deporte llevan esa muletilla final: balonmano femenino, fútbol femenino...

Es aquí donde comienza esta diferencia social en ambas modalidades. Incluso se llega a decir que el balonmano masculino y el balonmano femenino son deportes diferentes. Hay que tener una cosa clara, y es, como has leído al principio de esta entrada, hay diferencias biológicas que pueden afectar al modo de juego en según que deportes y momentos, y en el balonmano, así ocurre. El femenino destaca por su juego táctico, un mayor juego en equipo donde predomina la búsqueda de huecos y posiciones ventajosas y un gran trabajo defensivo. Por otro lado, el masculino es más explosivo, un juego más individualista con jugadas con más fuerza y mayor gol.

Esto no significa que uno sea superior al otro; sigue siendo un mismo deporte, el balonmano, con las mismas reglas. 

Espero que hayáis disfrutado esta publicación y nos esforcemos en que el deporte siga avanzando en su camino inclusivo e igualitario.